Por Claudia Velázquez
Matamoros, Tam.- Hasta el momento, la Tercera Jurisdicción Sanitaria, ha detectado 4 casos de paludismo y 2 de viruela símica entre la población migrante que se encuentra en Matamoros, pero podemos asegurar que todo está controlado, ya que se le da seguimiento a cada uno de los casos, expreso Gilma Dinhora Alcocer Cortez.
La titular de esta jurisdicción sanitaria, preciso que en efecto los migrantes traen enfermedades pero la mayoría no son preocupantes, lo que si nos preocupo es haber detectado paludismo, primero un caso, después otros 3.
De antemano sabemos que esta enfermedad no la tenemos en México, pero los migrantes la contraen al momento de pasar por la selva que se encuentra entre Colombia y Panamá y llegan a la frontera mexicana ya infectados, por lo que al momento de detectar, les damos el tratamiento que se requiere de forma inmediata para evitar complicaciones en su salud.
Afortunadamente ya 2 de estos 4 casos se recuperaron e incluso ya se encuentran en Estados Unidos quienes le darán el continua miento a su tratamiento, y los otros 2 se encuentran aislados, internados en el Hospital General, dijo.
El departamento de vectores está haciendo muestras en diversas zonas con acumulamiento de agua como el Laguito y otros lugares, y afortunadamente no se ha detectado el paludismo en Matamoros, por lo que podemos decir que los migrantes llegaron ya infectados y tenemos hasta ahorita todo bajo control, preciso.
“No hay crisis sanitaria e incluso no se ha dado ningún brote, porque no llega ni siquiera a 10 casos, que es cuando podría considerarse un brote y nosotros tenemos módulos sanitarios para estar pendientes de la salud de los migrantes, para tratar de detectar y atender a tiempo”, añadió la doctora.
Refirió que los dos casos de viruela símica que se detectaron, fueron aislados y se les dio el tratamiento de 21 días correspondientes para darlos de alta, y después de esos casos ya no se han registrado más.
Concluyo que es importante mencionar que los chequeos son voluntarios, si algún migrante nos dice que no quiere pruebas, no podemos obligarlo.
