Este martes las tensiones entre Rusia y Ucrania aumentaron, luego de que se diera a conocer que un grupo de mercenarios rusos fueron contratados para asesinar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
De acuerdo con información obtenida por el diario The Times, los mercenarios pertenecen a Grupo Wagner, una empresa militar privada, propiedad de Yevgeny Prigozhin, quien es un oligarca conocido como el cocinero de Vladimir Putin.
La compañía ha estado estrechamente asociada con los proyectos del presidente ruso en todo el mundo, ha llevado a cabo operaciones encubiertas en África y Oriente Medio, además también fue responsable de fomentar los problemas en el este de Ucrania en 2014.
En esta ocasión, Grupo Wagner llevó a más de 400 mercenarios desde África hace cinco semanas con la misión de decapitar el gobierno de Zelenski a cambio de una cuantiosa bonificación financiera.
No obstante, la operación arrancó desde enero, fecha en la que llegaron a Ucrania entre 2 mil y 4 mil mercenarios, algunos de ellos fueron enviados a las disputadas regiones orientales de Donetsk y Lugansk, mientras que otros 400 entraron desde Bielorrusia y se dirigieron hacia la capital.
Los mercenarios únicamente se encuentran esperando una señal del Kremlin para terminar con la vida del presidente ucraniano, y de otras 23 personas, incluido el primer ministro, el gabinete, el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, y su hermano Wladimir, ambos populares excampeones de boxeo que se han unido a la lucha militar contra los invasores.
Según información de una fuente cercana a las actividades del grupo, éstos conocen la ubicación del presidente y sus colegas, a quienes además pueden rastrear a través de sus teléfonos móviles.
