Gobernador de Michoacán acusa a la Iglesia Católica de proteger a criminales

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Morelia, México.- Los líderes de la Iglesia católica se han convertido hasta en voceros de los criminales, acusó ayer el Gobernador morenista de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, luego de que el Obispo de Apatzingán reprochó al Gobierno el aumento de la violencia en el País.

El religioso reclamó el pasado domingo a AMLO que en lugar de festejar su llegada al poder, debería pedir perdón por no pacificar al País.

“Critican al Estado, lo atacan, pero ellos mismos encubren a generadores de violencia y luego se convierten en voceros de bandas de criminales. Es una realidad, a veces no se dice por hipocresía política, pero es clara la intención de esta declaración desde el púlpito, del Obispo de Apatzingán (Cristóbal Ascencio García), de hacer política. Si quieren hacer política, que dejen la sotana”, reprochó el Mandatario.

“Todos tenemos una responsabilidad, y él como alto clérigo también; entonces, serenos, que recuerde el Obispo que sacerdotes promovieron en su momento las autodefensas”, insistió.

Sobre el asesinato del ex líder de autodefensas Hipólito Mora y tres de sus escoltas, el pasado 29 de junio, aseguró que la Fiscalía General del Estado (FGE) pronto informará sobre avances en la indagatoria.

“El objetivo es claro, que no quede impune el homicidio de estas cuatro personas, que es un tema muy importante, relevante para el Estado, es un tema de alto impacto en todo lo que implica y el objetivo único es que no quede impune y se haga justicia en este caso, es lo que estamos haciendo”, dijo.

¿Qué le dijo el Obispo a AMLO?

El pasado domingo, el Obispo Ascencio García dijo que en lugar de celebrar los cinco años de su llegada al poder, López Obrador debió decretar un día de luto por la creciente violencia en el País.

En su misa dominical, el líder católico urgió al Mandatario a reconocer que su estrategia de seguridad no funcionó en un País que rebasa los 125 mil asesinatos, y tiene poco más de 100 mil desaparecidos.

El Obispo lanzó el reclamo a unos 50 kilómetros de La Ruana, en la Tierra Caliente de Michoacán, donde fue emboscado y acribillado Hipólito Mora.

“Mientras algunas autoridades dicen que todo está bien, los que vivimos aquí y un servidor sabemos que no está bien.

“Ayer, nuestro Primer Mandatario celebraba el quinto aniversario de haber llegado al poder. Nos prometió que su principal objetivo era poner la paz y yo digo: en lugar de haber celebrado festivamente en el Zócalo, por qué no decretar un día de luto, de duelo nacional, no sólo por los fieles de la Diócesis que han perdido la vida, sino por tantos hermanos en México. Reconocer que en nuestro País hay más violencia que hace cinco años”.